Historia
Alelí y Liss vivían en una colonia de gatos, en un vecindario donde los residentes los maltrataban y los envenenaban para deshacerse de ellos… Debido al peligro al que estaban expuestos allí, se decidió que se iban a ir rescatándolos de la calle. Fueron retirados de la colonia en diferentes momentos, pero pasaron algún tiempo juntos en el mismo hogar de acogida para probarlos y vacunarlos para su posterior transición al refugio.
Llegaron asustados, y por desgracia aún siguen siendo tímidos con las personas, necesitan que les enseñen a confiar, pero en el refugio es difícil desarrollar esa confianza ya que pasan mucho tiempo solos…

Carácter
Alelí es una gata algo independiente de las personas. Durante el tiempo que pasó en la casa de acogida se dejaba tocar y manipular pero al mudarse al refugio ha dado pasos atrás, así que está llevando tiempo y paciencia para descongelarse. Aún así, coge chuches de nuestras manos y se ve que quiere confiar.

Es muy sociable con sus compañeros felinos, siempre ha estado rodeada de otros gatos y ahora en el refugio comparte tiempo, comida y juguetes con el resto sin problema, conoce las normas de comportamiento. No sabemos qué opina de los perritos, pero si su futura familia necesita saberlo, se puede probar.

Alelí es jovencita y tiene mucha energía y alegría para jugar. Disfruta jugando con sus compañeros, pero también con los juguetes de la gatera. Creemos que dada su edad ella se adaptaría bien con niños, ya que sería una buena figura de juegos y se lo pasarían genial, aunque es mejor que sean más bien grandes, que sepan darle tiempo y espacio para acostumbrarse y construir confianza.

Hogar ideal
Alelí está lista para mudarse a una familia. Está en la edad ideal para aprender a confiar y perder sus miedos. Por desgracia, aunque lo intentamos, no hay mucho que podamos hacer por ella en el refugio ya que somos much@s l@s voluntari@s que acudimos diariamente y está teniendo dificultades para crear confianza con alguien allí.

Es indispensable que sus adoptantes tengan experiencia con gatos y también tiempo y paciencia para trabajar con ella en sus miedos, sería ideal que en su nuevo hogar tuviera un hermano gatuno, que tome como ejemplo y le ayude a acostumbrarse a su nuevo entorno y dueño/s.
Le gusta disfrutar del solecito en la parte exterior del refugio, por lo que si en su futura casa pudiera tener un balcón o terraza protegidos creemos que sería muy feliz.

Alelí necesita una familia estable, cariñosa y entregada a hacerla feliz, ¡ella se lo merece!