Zeus fue encontrado por una chica en la calle solo, no se lo podía quedar, pero apareció un señor que le dijo que él lo cuidaría, así que se lo dio. Sin embargo, el perro vivía en la calle… este señor tenía problemas con el alcohol y no era capaz de cuidarlo, así que Zeus acabó en la perrera. 
Una pareja que conocía al perro de verlo por las calles se enteró de su destino y lo sacaron de allí. Quién sabe cuánto hubiera durado en la perrera, los perros adultos y de gran tamaño no suelen salir adoptados pronto, por lo que la vida de Zeus hubiera acabado mucho antes de lo que le corresponde. 
Ahora está en una acogida temporal estupenda, pero busca un verdadero hogar. Zeus vive con machos y hembras y es muy cariñoso y sociable. Además, sabe pasear con correa muy bien, y disfruta saliendo. Con los gatos no se lleva bien, pero por lo demás es un gran perro que ha tenido una trágica vida.  

Ya es hora de que Zeus encuentre una verdadera familia, ¡no nos rendiremos hasta que este grandullón encuentre hogar!